Sufrir un siniestro vial no solo conlleva a padecer dolores y preocupaciones, los gastos relacionados a la atención hospitalaria siempre son un problema a considerar. El periodo de inactividad que debemos afrontar puede hacernos sentir impotentes, pensando en esto existe la tabla de indemnización por accidente de tráfico, instrumento usado para calcular las reparaciones justas, según cada caso.
Ser perjudicado en un incidente como este es más complejo de lo que algunos piensan. Los efectos negativos se extienden más allá de los plazos de recuperación prestablecidos por el traumatólogo. Hay pacientes que enfrentan dificultades tan abrumadoras que no vuelven a ser ellos mismos.
Incluso la invalidez temporal genera pérdidas económicas considerables. Cuando los golpes son fuertes tenemos prácticamente que aprender de nuevo a realizar acciones que antes dominábamos fácilmente: caminar, agarrar objetos y desarrollar masa muscular en las extremidades. Frente a este cuadro debemos ser diligentes y reclamar la compensación que nos corresponde.
Sobre baremo para indemnización de accidentes de tráfico
Imprudencia es sinónimo de responsabilidad. Si alguien quebranto tu salud por descuido, lo justo es que el mismo se haga cargo de su error. Es por eso que existe un Sistema para la Valoración de los Daños y Perjuicios Causados a las Personas en Accidentes de Circulación, dicho instrumento establece las reglas y criterios para fijar las compensaciones.
El baremo está conformado por una serie de tablas que les sirven a los abogados para hacer el cálculo de cada compensación para honrar lo que la ley estipula, que no es más que el culpable debe hacerse cargo de todo lo relacionado a la reparación, teniendo en cuenta aspectos materiales y morales. En este sentido, lo primero que le corresponde al perjudicado es el pago de los tratamientos, las medicinas y la cobertura de los costes de la rehabilitación.
El tiempo de inhabilitación física también tiene que ser recompensado. Desde el periodo hospitalario y hasta el de recuperación no limitante. Es decir, que si tú sufres secuelas permanentes, el culpable del evento deberá pagarte por eso, la idea es hacer más llevadera tu vida luego del incidente.
Reclamar es pensar en el porvenir
Sin duda pedir por una compensación es proteger tu futuro. Por ello, lo mejor es contar con un abogado y el informe médico de un perito forense privado que valide un diagnostico justo e imparcial. Debes resistir hasta recibir lo que realmente mereces, no hacerlo podría significar consecuencias económicas para ti y tu familia en lo sucesivo.
Ocurre que algunos se rinden y aceptan las negociaciones de las aseguradoras de los responsables. Estas siempre buscan pactar acuerdos para su beneficio en detrimento del perjudicado, los resultados son escandalosamente negativos para la víctima. Así que recurre a los abogados de Cáceres y lucha por tus derechos, la recompensa será la tranquilidad.