Si decidiste que tus siguientes vacaciones serán en Estocolmo, no puedes dejar de visitar su palacio real, que, por cierto, es unos de más grandes y utilizados entre los palacios de Europa.
Su historia remonta en haber sido la residencia oficial del imperio monarca sueco y el más grande de los palacios. El día de hoy está situado, en Stadsholmen, que es la isla de la ciudad en Gamla Stan, ciudad vieja de Estocolmo y este palacio entre otros usos que le dan, es utilizado con objetivos de representación que el rey cumple como jefe de estado.
En cuanto a la historia arquitectónica, se refleja su arte y estructura al estilo barroco italiano, desde la Edad Media. El fin de construcción fue el año 1754.
Si damos la vuelta a una página anterior a la historia de este palacio, data desde comienzos del siglo XVIII, antes conocido como la antigua fortaleza de Tre Kronor, en español Tres Coronas, construida en ese mismo lugar en el siglo XIII, por Birger Jarl, quien dio el mandato de construir dicha fortaleza, pero lamentablemente fue destruida por un incendio el año 1697, se rescató poco de este incendio, posteriormente se construyó el palacio Real, en colaboración del arquitecto Nicodemus Tessin durante los primeros años, con un estilo barroco, cambiando de a poco algunas cosas al estilo rococó.
La demora en la construcción del palacio Real, fue de alrededor de 60 años, siendo algunas variables políticas y económicas el motivo de esta demora.
El Palacio Real de Estocolmo, cuenta con 1.430 habitaciones entre salas.
Te recomendamos que puedas ver cuando vayas a visitar el palacio, algunas de las habitaciones privadas, entre salones y otras privadas de la realeza, contando la Capilla Real, entre otros espacios.
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Éxito en tus vacaciones 😉